Para
recuperarnos del extrañamente desapacible tiempo que hacía esa primera tarde de
Julio en Barcelona, puesto que había caído una señora tormenta algo más que de
verano, empezamos con una sopita caliente que casi siempre entra muy bien, y
dado que estábamos en un restaurante japonés, pedimos dos tazas de miso shiru,
sabroso y reconstituyente como debe ser.
Luego
vino la berenjena asada o yaki nasu, cubierta de copos de bonito seco
(katsuobushi) y que nos aconsejaros regar con salsa de soja a modo de aliño.
Siguieron
los yakisoba, un clásico en nuestros ágapes nipones que, la verdad sea dicha,
me empieza a cansar un poco, pero por otro lado también es la manera de llenar
un poco el estómago y no depender del pescado crudo y sus precios a veces
prohibitivos.
Como
una de las recomendaciones del día tenían la tempura de cocochas de merluza con
salsa de ciruelas. Curioso juego de texturas entre la melosidad de las cocochas
y el rebozado súper crujiente, que estaban bien con poco más que añadir. La
salsa de ciruela o era muy escasa o demasiado sutil, porque yo ni la noté.
Otra
de las sugerencias eran los niguiris de sardina soasada, que cumplieron
nuestras expectativas. Y siguiendo en el apartado sushi pedimos el surtido del
chef, que incluyó niguiris de toro asado y crudo, caballa, gamba con su cabeza
y todo, un gunkansushi de huevas de salmón y dos piezas del maki de la casa, un
futomaki de salmón, atún y aguacate. Todos estupendos aunque no seamos muy
amantes en particular de las huevas de pescado.
Todo
esto regado con una botella de Gessamí Gramona y otra de agua. No fue una
comida especialmente abundante pero es que habíamos parado en el Bilbao Berria
de la plaza de la catedral a hacer unos pinchos a modo de aperitivo, y aún así casi
subió 40 euros por cabeza, claro que la calidad, tanto de las elaboraciones
como de los ingredientes, del sushi sobre todo, hacen de este restaurante uno
de los mejores de Barcelona y eso se ve obligatoriamente reflejado en la
cuenta.
Shunka
Calle Sagristans, 5
08002 Barcelona
934 12 49 91 (obligatorio reservar y con tiempo si se quiere estar en la barra)
Lunes cerrado
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